domingo, 22 de noviembre de 2015

LA VENTANA DEL MAYOR (236)

INTRODUCCIÓN A UNA TESIS DOCTORAL (2 de V)

La preocupación por difundir la idea de que se puede envejecer competente y saludablemente, por los avances de las ciencias biológicas, sociales y  de las humanidades, ha motivado el desarrollo de una serie de conocimientos y técnicas que permiten dar no solo años a la vida, sino vida a los años, es decir calidad de vida. 
      
El análisis conceptual de calidad de vida en las personas mayores; los elementos y circunstancias que la acompañan, así como sus dimensiones y evaluación, a través de indicadores, nos ha servido para   profundizar en  el componente real o ser  físico, psicológico y espiritual; su pertenecía a la comunidad y papel en la misma; así como el  llegar a ser. Todo ello objeto de un detenido estudio, teniendo siempre en cuenta los aspectos sociográficos, discriminantes e interpretativos, como vertientes en relación con la condición de persona mayor. 

Aspecto interesante y como resultado de lo anterior, es el estudio de la tipología de estilos de vida, consecuencia de la conjunción de los indicadores de calidad de vida o nivel de posesión de bienes materiales, sociales, y culturales. La llegada  de la jubilación  condiciona actitudes creativas; practicas consumistas; situaciones participativas; y posturas reivindicativas o  decadentes.

Las actitudes y acciones sociales están presentes en el desarrollo del tema, haciendo un recorrido desde la vejez invisible a la vejez identificada; y desde la  vejez asistida a la vejez integrada. Los problemas de la edad; el envejecimiento como degeneración personal, exigen un cambio social y económico del sistema político,  evitando la segregación por edad, que divide a la familia humana, perpetuando el conflicto y la necesidad social. (Continuará) 

LA VENTANA DEL MAYOR (235)

(1)
INTRODUCCIÓN A UNA TESIS DOCTORAL (I de V)


El enunciado de la  Tesis Doctoral señala el camino a estas líneas de  introducción. El envejecimiento en el siglo XXI,  es un fenómeno cultural, no uniforme, eminentemente plural, asincrónico, heterogéneo, y en el que el azar, la vida o los problemas sociales, ha esculpido, a su antojo, rostros diferentes de vejez. El alargamiento de la duración de la vida humana reedefine sin cesar el recorrido de edades, lo que conduce a la multiplicación de las etapas del ciclo vital y la reinterpretación de los significados del recorrido. 


Ante el  modelo productivo,  en donde el sentido de la vejez es una condición impuesta por la sociedad, a través de la jubilación, que supone el paso  de la actividad a la inactividad laboral, se impone la elaboración de un modelo de vejez satisfactoria, a partir del concepto de autonomía, que se enfrente al doble reto de: superar   los tópicos e ideas falsas que popularmente se proyecta sobre la vejez, entorpeciendo su comprensión y desarrollo;  y  vencer los eufemismos que se emplean, para denominar realidades dolorosas o despreciable. Afrontar el envejecimiento con actitud  participativa, autorealizable, creativa, intelectual, con un concepto y percepción positiva, reconocida socialmente. En definitiva considerar a las personas mayores como sujetos de la educaciòn en el contexto del envejecimiento,  con sus significados, procesos,  rasgos culturales y calidad de vida 


El estudio de las personas mayores en la actualidad, proporciona datos acerca de cómo será la vida de este grupo de población en el futuro, pasando de la invisibilidad y anonimato, a una presencia constante, a veces llamativa, en la mayoría de los ámbitos sociales.

Aunque los indicadores demográficos, muestran la realidad de unos países industrializados que envejecen, y seguirán envejeciendo en las próximas décadas, por el incremento de la esperanza media de vida y por el bajo índice de natalidad, dicho fenómeno ha de ser considerado como signo y resultado  del desarrollo social y económico; y  con un conjunto de valores considerados como parámetros, que definen la cultura del envejecimiento, generadora de un espacio en el agregado de culturas diferenciales que conforma la sociedad.

En estrecha relación con los distintivos de dicha  cultura,  se hace obligado analizar las connotaciones y los derechos que  asisten a las personas mayores, haciendo un recorrido por el catálogo de sus necesidades; formas de manifestarse, así como su evaluación e instrumentación.


En el concepto cultural del envejecimiento se  impone el interés por efectuar un estudio detenido de la jubilación, que nada tiene que ver con la vejez tradicional que, impuesta legalmente, homogeneiza a las personas a partir de una determinada edad cronológica, fijada arbitrariamente. Y aunque en su día fue una conquista social y nació como un derecho, en la actualidad se impone una buena disposición ante ella, para lograr diluir sus significantes  y  manifestaciones lesivas, haciendo posible que el sujeto manifieste conductas más ajustadas a la realidad, facilitándole los niveles positivos de socialización y autopercepción (continuará)


(1) Tesis doctoral “EDUCACIÓN Y UNIVERSIDAD EN EL MARCO CULTURAL DE LAS PERSONAS MAYORES” Doctorando Enrique Pozón Lobato. Facultad de Ciencias de la Educación   de la Universidad de Málaga. 24 de febrero de 2006


domingo, 8 de noviembre de 2015

LA VENTANA DEL MAYOR (234)

CUIDAR Y EDUCAR A LOS NIETOS ¿DISFRUTE O AGOBIO DE LOS ABUELOS?

    El trabajo recae más sobre las abuelas que cuidan una media de 6,2 horas al día a sus nietos. Pero los abuelos tampoco se libran de este menester pues según estudios recientes dedican 5,3 horas diarias al cuidado de sus nietos. Para unos abuelos es un auténtico disfrute, una inmensa alegría, un honroso honor, poder dedicar parte de su tiempo libre de jubilado atender a los nietos


Pero para otros muchos abuelos el cuidado de los nietos supone un agobio, una opresión, más aún, una esclavitud, porque te ven obligados a asumir unas responsabilidades excesivas en su cuidado y educación. También se ha comprobado  que interviene un factor social y económico. Puesto que las familias con pocos recursos económicos, que no tienen posibilidad de contratar canguros o de dejar a sus hijos en guarderías y colegios, los padres se ven obligados a delegar el cuidado de los hijos a los abuelos que afirman, en muchas ocasiones, sentirse utilizados y angustiados. Más de un 50% de los abuelos cuidan a sus nietos casi todos los días y el 45% casi todas las semanas. Muchas veces los criterios tradicionales de cómo hay que educar a los niños pequeños no son los mismos que tienen los padres jóvenes que acusan a sus padres de “malcriar” a sus hijos. 


Cuando se trata de familias acomodadas y con recursos económicos sucede justo al revés. Que muchos abuelos y abuelas se quejan de que ven poco a sus nietos, de que no se los dejan disfrutar tanto como desearían. Muchos abuelos se quejan en las encuestas de que ellos ya tuvieron su etapa, cuando eran jóvenes, de cuidar y educar a sus hijos. Ellos ya cumplieron con esta etapa de la vida con muchos sacrificios y dedicación. Y que se les hace muy duro en la jubilación y en la vejez volver a criar a sus nietos. Y se hacen una pregunta angustiosa ¿y a nosotros quién nos cuida? Les entra la maldita duda de quién o quiénes les cuidará a ellos el día de mañana cuando los achaques y enfermedades propios de la edad avanzada comiencen a aparecer.

LA VENTANA DEL MAYOR (233)

UNA BUENA NOTICIA: LAS PERSONAS MAYORES SE PELEAN POR SER INTERNAUTAS Y NAVEGAR POR LA RED


Las entradas o, mejor dicho, las matrículas están agotadas. Centros de Día, Clubes de Jubilados, Hogares de Pensionistas, Aulas de Tercera Edad, Universidades para Mayor personas mayores, etc. ponen el cartel de “No hay plazas”, porque están a tope en las clases de informática que planifican y organizan para la gente mayor. Los mayores se pelean por conseguir una plaza en las aulas de informática

Son pocos los que no se enganchan a la red. Todos quieren aprender a navegar por Internet, todos quieren chatear con los hijos y nietos, todos quieren ser internautas, todos quieren estar al día y no quedarse atrás en el uso de las nuevas tecnologías, todos sienten la necesidad de intercambiar correos electrónicos, Es la revolución digital de los mayores. Es la revolución gris de los mayores.



Está comprobado, los jubilados y pensionistas manejan el Internet como cualquier joven o niño. Los mayores buscan sus hoteles y sus viajes navegando por la red, investigan sobre posibles ofertas en vuelos de avión, en hoteles de playa, en casas rurales, en billetes de tren y hasta en coches de alquiler. Los maestros y profesores de muchas personas mayores son sus propios nietos que tienen más paciencia que los hijos para enseñar pacientemente las primeras clases. El número de los Internautas mayores aumenta de día en día. Es una buena noticia. Las personas mayores no quieren quedarse atrás y se aplican intensamente a sacarle el jugo a todas las aplicaciones de Internet y de las nuevas tecnologías en general. Es una muy buena noticia de la que todos debemos alegrarnos.